Una de las películas que más me impactaron fue Troya de Brad Pitt. Cuando la vi entendí cómo se escribía la historia.
En los relatos tradicionales Aquiles era un guerrero invencible, que tenía un único punto débil, su talón.
En la película, lo acribillan a flechazos y el una a una se las va quitando y la que no puede quitarse, la del talón se la deja, hasta que muere. En esto llega la policía, que siempre llega tarde, y ve la escena. Aquiles murió porque le dieron en el talón. Esta parte de la película me pareció espectacular.
Tal derroche de heroísmo tenía que ser contado y Hércules, amigo de Aquiles dice: “Yo viví en tiempos de Aquiles”, orgulloso de haber pasado las calamidades que duraron 10 años hasta la conquista final de Troya.
Ese mismo sentimiento tengo yo, de vivir en los tiempos del Covid_19, de ver como héroes salvan vidas jugándose las suyas propias, sin ver a sus familiares y sin poder despedir a los que se van.
Orgulloso de aquellos emprendedores que se quedan y que se reinventan, y rediseñan un entramado comercial, para poder salir adelante, sin grandes expectativas. Ellos para mí son los héroes.
Sin duda hay un antes y un después del Covid_19, ¿cómo será ese después? Esto es una gran incógnita, pero te podré dar algunas pinceladas para pintarte el futuro.
El trabajo de casa ha llegado para quedarse. Las empresas se tendrán que adaptar a esta circunstancia, descentralizar la actividad. El departamento comercial estará en un sitio, y el de ventas en otro, los jefes trabajaran desde casa.
Se acabó eso de ir a sitios concurridos, aquellos negocios que dependen de esto, verán muy minado sus ingresos.
La transformación digital, que es muy diferente a trabajar desde casa, se hará imprescindible.
La gente se tiene que mover, tienen que estar orgullosos de vivir en tiempos del Covid_19